La oferta que nunca llega: las inmobiliarias de Barcelona esconden la mayoría de los anuncios de alquiler

Buscar piso en Barcelona se ha convertido los últimos años en una odisea. Precios desorbitados, poca oferta, ‘castings’ para ganarse el favor de los propietarios… Una cruzada a la que se suma la retirada de anuncios en los portales por parte de las inmobiliarias.

Barcelona sigue siendo la ciudad española más cara para alquilar pese al tope de precios

En muchas ocasiones, no hace falta ni que propietarios ni empresas difundan que uno de sus pisos se ha quedado vacío.

A través de listas internas o conocidos, los contratos de arrendamiento se llegan a cerrar sin que el apartamento haya visto la luz en Idealista, Fotocasa u otras webs inmobiliarias.

Un cartel de un piso en alquiler en una imagen de archivo EUROPA PRESS

500 llamadas en media hora

La lista de espera de inquilinos no hace más que agrandarse con cada publicación, explica el director general de Grup Solfinc, Ramón Soler, una agencia que lleva casi 50 años afianzada en la capital catalana y el área metropolitana.

“El otro día publicamos un anuncio y en media hora recibimos 500 llamadas”, afirma el administrador.

Amat Immobiliaris, en su último informe sobre el mercado inmobiliario, también alude a este hecho. “En 2024 hemos dejado de publicar la mayoría de viviendas”, asegura. Del total de su cartera, tan solo anunciaron un 26%.

De hecho, las viviendas que salen en los portales, apunta Amat, son las de rentas más altas y con superficies por metro cuadrado más grandes, lo que vuelve más adverso para los inquilinos encontrar un hogar asequible.

Un piso de lujo en Barcelona BARNES

Pérdida del 50% de la oferta

Las inmobiliarias también han sufrido la caída de la oferta. Soler recuerda que antes de la Ley de Vivienda llegaban a alquilar entre 20 y 30 pisos mensualmente. Una cifra que, hoy en día, “con suerte” llega a 10.

Desde Amat, alertan que los nuevos contratos han caído por tercer año consecutivo, con una pérdida del 43% entre 2022 y 2024.

“Nunca habíamos tenido tan poca oferta para alquilar. Los inversores que antes compraban para arrendar han desaparecido y hemos notado que cuando se termina un contrato, muchos propietarios prefieren vender el piso o reservarlo para sus familiares”, ha explicado Soler.

Caída de la oferta en portales

Las consecuencias son evidentes en el mercado. Idealista perdió entre 2020 y 2024 más de 40.000 viviendas de alquiler permanente en la capital catalana, lo que supuso una caída de la oferta del 84%.

A día de hoy, la ciudad de Barcelona concentra entre 5.000 y 6.000 anuncios en el portal inmobiliario, de los cuales casi 1.500 son de larga duración y el resto de temporada.

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Competición feroz

Todo ello, maximiza la competición entre inquilinos, que se vuelve feroz. Las personas que buscan piso o compartir habitación deben pasar por entrevistas y probar su solvencia para acceder a una vivienda y, aun así, muchos no son escogidos.

"Hay muchos candidatos que son buenos, pero hay mucha demanda... Es inevitable", lamenta Soler.

Colas en la calle para alquilar un piso de menos de 1.000 € en Gràcia Xarxa d'Habitatge Horta-Guinardó

Según datos de Idealista, durante el primer trimestre de 2025 una media de 61 familias se postularon por cada anuncio de piso en alquiler en la capital catalana, consolidándose como la ciudad con mayor competencia del país.