
Máquina de venta del metro de Barcelona con pago contactlesss
Llega la novedad más esperada a las máquinas de venta del metro de Barcelona: disponible en estas estaciones
La nueva funcionalidad permite pagar con tarjeta o móvil sin contacto y ya están operativas en algunas estaciones
Ni la L1 ni la L5: la línea del metro de Barcelona que estrenará nueve estaciones y llegará hasta Esplugues
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El metro de Barcelona estrena por fin una de las mejoras más demandadas por los usuarios: el pago contactless en las máquinas de venta de billetes.
Este martes, Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) ha comenzado a instalar los nuevos terminales en las estaciones más frecuentadas por turistas, como Aeroport, Fira y Collblanc, según ha podido saber Metrópoli Abierta. El plan de implantación continuará progresivamente en el resto de la red.
La novedad marca un giro en la experiencia de compra del billete en el suburbano barcelonés.

Máquinas de venta de billetes de metro
Hasta ahora, la mayoría de máquinas solo permitían pagos en efectivo o con tarjeta mediante inserción y PIN, una opción cada vez más obsoleta frente al auge de los pagos sin contacto.
Las primeras estaciones con datáfonos ya operativos
La instalación de estos nuevos dispositivos se está haciendo sobre las máquinas actuales, aprovechando el módulo vacío a la derecha de la pantalla, debajo del bloque donde se teclea el número pin de la tarjeta.

El lector contactless instalado en una máquina de venta de billetes de metro
El diseño de las nuevas máquinas permite adaptar y sustituir componentes sin necesidad de cambiar todo el aparato, lo que agiliza la renovación.
Una modernización anunciada… y muy esperada
La llegada del contactless a las máquinas del metro se anunció hace más de un año como parte del plan de modernización tecnológica de TMB.
El objetivo: facilitar la vida al usuario y adaptar el sistema a los estándares de pago actuales, más rápidos, seguros y eficientes.
Cabe recordar que TMB adjudicó 165.165 euros a la empresa Tekia Ingenieros, no para adquirir las máquinas, sino para que elaborase un informe técnico sobre cómo instalar estos dispositivos.
El camino hasta su implementación ha sido largo, pero ya empieza a traducirse en una mejora real y tangible para los usuarios.