'Kárate a muerte en Torremolinos' y 'Ellos robaron la picha de Hitler': el cine basura de la Cutrecon aterriza en Barcelona

Barcelona abre sus brazos —y sus ojos incrédulos— a la primera edición de la Cutrecon, el festival internacional dedicado al cine más delirante, desastroso y deliciosamente fallido del planeta.

Los días 6 y 7 de junio, los Cines Verdi Park y el Casinet d’Hostafrancs se convertirán en templos del culto trash, con películas que jamás ganarán un Óscar, pero sí el corazón de quienes aman el cine... aunque sea el peor.

Tras catorce ediciones en Madrid, y en un momento donde la oferta cultural en Barcelona lucha desesperadamente por diferenciarse, la Cutrecon desembarca por fin en la capital catalana con una programación que no deja títere con cabeza.

Póster de ‘Super Mario Bros’ (1993), en una nueva versión remasterizada en 4K Cutrecon

Desde el Star Wars turco —una copia ilegal y low-cost de la mítica saga, rodada en 1982 con música robada a John Williams y escenas directamente fusiladas del filme original— hasta la infame Super Mario Bros (1993), que abrirá el festival con una proyección remasterizada en 4K. 

Cine basura... pero con pedigrí

Lo que para muchos es un despropósito cinematográfico, para otros es arte outsider con denominación de origen.

La Cutrecon no se ríe del cine malo: lo celebra. Y en Barcelona lo hace a lo grande, con títulos imposibles como El Increíble Bulk (2012), una parodia involuntaria del universo Marvel hecha con gráficos de videojuego de los 90 y diálogos que harían llorar a Stan Lee.

Pero si hay un nombre propio que destaca en esta edición inaugural barcelonesa, ese es el de Pedro Temboury, el cineasta malagueño de culto al que se rinde homenaje el 7 de junio.

Producciones

Sus películas Kárate a muerte en Torremolinos (2003) y Ellos robaron la picha de Hitler (2006) se proyectarán como muestra de que el esperpento también puede tener sello nacional.

¿La trama? Zombies karatekas, surferos católicos y crustáceos asesinos por un lado; una conspiración internacional en torno a los genitales momificados del Führer, por otro. Y sí, Jess Franco tiene un cameo.

Lo que propone la Cutrecon no es un simple maratón de carcajadas fáciles. Es una experiencia colectiva que reivindica el error, el exceso, el absurdo y, por qué no, el entusiasmo de quienes filmaron con más pasión que presupuesto.

Es cine para gritarle a la pantalla, pero también para abrazar lo que el cine mainstream descarta.

Información útil

• Fechas: 6 y 7 de junio

• Lugares: Cines Verdi Park y Casinet d’Hostafrancs

• Entradas disponibles en la web oficial y en taquilla