Paseo de Sant Joan / HUGO FERNÁNDEZ
La calle de Barcelona que se ha puesto de moda por sus bares de tapas: "Auténtica, bonita y animada"
El paseo de Sant Joan se consolida como el nuevo eje del tapeo barcelonés, con más de 50 bares en dos kilómetros y un ambiente que mezcla modernismo, terrazas y vermut
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Barcelona no deja de reinventarse. Aunque sus clásicos turísticos siguen atrayendo a millones de visitantes cada año, hay calles que, sin necesidad de Gaudí ni selfies, se están ganando un lugar en el mapa gracias a una oferta gastronómica que no necesita artificios.
Una de ellas es el paseo de Sant Joan, que en los últimos años se ha transformado en la calle de tapas más popular entre los barceloneses.
Dos kilómetros, más de 50 bares y mucha vida
Lo que hace unos años era una avenida más del Eixample, ha ido adquiriendo carácter propio. En apenas dos kilómetros —desde el Arco del Triunfo hasta la plaza de Mossèn Jacint Verdaguer— han abierto más de 40 nuevos bares y restaurantes en la última década, muchos de ellos con una clara vocación: servir buenas tapas sin pretensiones.
Terraza llena en el paseo de Sant Joan una tarde cualquiera / METRÓPOLI
Patatas bravas, calamares, tortilla, jamón, croquetas… Todo lo que un local o turista puede esperar tras un paseo largo o una jornada de oficina.
Y con el extra de que, en lugar de encerrarse en una callejuela sin ventilación, se puede comer en amplias terrazas bajo la sombra de los árboles, con fachadas modernistas como telón de fondo.
Ni el Born ni el Gòtic: aquí manda el tapeo con acento local
Mientras barrios como el Born o el Gòtic se llenan de franquicias y menús turísticos, el paseo de Sant Joan ha logrado conservar un aire más vecinal y relajado, algo que no ha pasado desapercibido.
Tapas del Bar Oller / RRSS
En 2021, la prestigiosa revista Time Out la incluyó como la segunda mejor calle del mundo, destacando precisamente su ambiente auténtico y su equilibrio entre vida de barrio y dinamismo urbano.
¿Dónde tapear? Algunos nombres para tomar nota
Entre los más de 50 locales que salpican el paseo, hay algunos que ya se han ganado fieles:
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Viti Taberna: vermutería con sabor vasco, catalán y latino, ideal para una tarde sin prisas.
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La Foga: platos sencillos, internacionales y bien hechos, perfectos para una cena informal.
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Kook: tapas mediterráneas, ambiente moderno y un tiramisú que pide aplausos.
- Cerveceria La Barcelonesa: una fuente de cerveza y una carta de cocina catalana hecha con clase y tradición
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Dibuono: parrilla argentina que también sabe jugar con el tapeo español.
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Secrets del Mediterrani: cocina de autor a precios razonables, con guiños a la tradición.
La calle que no para de crecer
El éxito del paseo de Sant Joan no es casualidad. Su diseño amplio, el buen transporte público, la mezcla de estilos arquitectónicos y la apuesta por una restauración de calidad han hecho de esta calle algo más que una moda: un nuevo punto de encuentro para quienes disfrutan del tapeo sin artificios.
Y aunque los turistas la van descubriendo poco a poco, son los propios barceloneses quienes más la recomiendan, sabiendo que, entre vermuts, bravas y terrazas animadas, se esconde una de las mejores postales cotidianas de la ciudad.
Pasear, parar y picar. Eso es el paseo de Sant Joan. Y, por ahora, no tiene rival.
