Daniel Tomàs, el artista que ha pintado cincuenta persianas de comercios de Sant Antoni Barcelona
Del grafiti al arte urbano: Daniel Thomàs, el artista que decora los comercios de barrio en Barcelona
El muralista ha decorado más de cincuenta negocios en Sant Antoni, Sants y municipios del área metropolitana para ensalzar la figura de los pequeños propietarios
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Los barrios de Barcelona resisten por conservar su identidad. En un contexto donde cada vez más cadenas y grandes franquicias se adueñan de locales familiares o pequeños con años de experiencia a sus espaldas, los comerciantes se unen para que el tejido vecinal de la zona no se pierda.
Ejemplo de ello es Sant Antoni, cuya asociación comercial ha lanzado varias campañas para ensalzar las figuras de los dueños y dueñas detrás de las tiendas de ropa, de electrodomésticos, peluquerías o bares.
Daniel Thomàs (@danielthomasss), dibujante, ilustrador, muralista y vecino del barrio, es el artista detrás de los característicos diseños que decoran las persianas de una cincuentena de negocios del barrio.
Persiana pintada por Daniel Thomàs
Ensalzar al comerciante
Los colores rojos y las caricaturas denotan la clara huella que quería dejar la campaña, centrada en poner cara a las personas que contribuyen a la red vecinal. De hecho, gustó tanto a los locales del barrio, que varios propietarios encargaron más decoraciones de persianas a Thomàs y prácticamente no hay una calle del barrio en la que no haya dejado su marca.
“Todo empezó hace un año. Me enteré de que la asociación de comerciantes de Sant Antoni buscaba dignificar los espacios del barrio, sobre todo de las persianas, que suelen estar muy descuidadas, y les hice una propuesta”, explica.
Persiana pintada en Sant Antoni por Daniel Thomàs
En menos de dos meses, el artista tuvo que pintar 33 persianas en total. Fue algo “extremo”, reconoce, pero el resultado tuvo muy buena acogida. Sin embargo, tuvo que enfrentarse a los problemas que conlleva pintar en la calle.
Arte urbano o grafiti
“Más de una vez me han criminalizado por pintar con espray. Me han increpado y me han amenazado algunas personas con que me iban a poner una multa o que lo que hacía estaba prohibido”, ha indicado Thomàs. Incluso los Mossos d’Esquadra o la Guardia Urbana le han llegado a pedir el permiso.
Carro repleto de material para pintar persianas del artista Daniel Thomàs Barcelona
Aun así, “ahora hay mucha más distinción de lo que es el arte urbano o muralismo contra el grafiti”, ha aclarado.
Para el artista, el grafiti tiene un componente que lo hace ilegal, mientras que el arte urbano o el muralismo se mueve en el terreno de los encargos y se puede acreditar formalmente.
Otros barrios interesados
Thomàs ha llevado a cabo campañas como la de Sant Antoni en otros barrios como Sants, de la mano de la asociación de comerciantes de Creu Coberta, o en municipios del área metropolitana como Sant Adrià de Besòs.
Todos con el objetivo de captar la esencia del comercio y plasmarlo en la puerta de entrada, la persiana, con un material tan estigmatizado como el espray, incluso por parte de las administraciones.
Persiana pintada en Creu Coberta por Daniel Thomàs
Sanciones a grafiteros
El Ayuntamiento de Barcelona, a través de estrategias como el Pla Endreça, impone sanciones de hasta 600 euros para controlar las pintadas no autorizadas porque considera que este tipo de inscripciones degradan el espacio público.
Así, los grafiteros son a menudo multados por la Guardia Urbana y se consideran un acto de vandalismo.
